Newark, NJ – La ciudad de Newark está de luto tras un trágico accidente automovilístico que cobró la vida de seis personas el pasado viernes por la noche. El incidente ocurrió alrededor de las 10:45 p.m. en la intersección de Raymond Boulevard y Blanchard Street, cuando un vehículo se salió de la carretera y se estrelló contra una columna del Pulaski Skyway, desencadenando un incendio fatal.
Según las autoridades, el vehículo transitaba por Raymond Boulevard hacia la rampa de entrada a la Ruta 1-9 en dirección sur cuando, por razones aún desconocidas, se desvió de la carretera, voló por el aire y golpeó una columna de soporte del Pulaski Skyway. Tras el impacto, el automóvil se incendió, resultando en la muerte de las seis personas que se encontraban a bordo.
Entre las víctimas se encuentran Brad Cunningham, exjugador de Rutgers, y Lamar McKnight, entrenador en jefe de Hudson Catholic, según confirmó Greg Schiano, entrenador en jefe de fútbol de Rutgers, mediante un comunicado en redes sociales. Las identidades de las otras cuatro víctimas no han sido reveladas por las autoridades.
La policía de Newark ha indicado que no se sospecha de ningún delito en relación con la caída del vehículo a los rieles. La oficina del fiscal del condado de Essex está llevando a cabo una investigación para determinar las causas exactas del accidente.
El accidente ha generado una ola de conmoción en la comunidad local, especialmente entre los estudiantes y colegas de los entrenadores fallecidos. La escuela Hudson Catholic ha cerrado temporalmente para brindar apoyo emocional a las familias y estudiantes afectados por esta tragedia.
El servicio de trenes de la línea C fue suspendido temporalmente entre W 4 St-Wash Square y Euclid Av en ambas direcciones debido al accidente, lo que provocó retrasos adicionales en la línea A en dirección sur.
En conclusión, este trágico accidente subraya la importancia de la seguridad vial y la necesidad de investigar a fondo las causas de tales incidentes para prevenir futuras tragedias. La comunidad de Newark se une en el dolor y la solidaridad mientras llora la pérdida de estas seis vidas.