La manzanilla, una planta medicinal conocida desde la antigüedad, es ampliamente valorada por sus beneficios para la salud, especialmente en el alivio de problemas estomacales. Diversos estudios y expertos respaldan su uso como una solución efectiva y segura para tratar afecciones digestivas como acidez, indigestión y cólicos.
Propiedades de la manzanilla
La manzanilla contiene compuestos activos como flavonoides y aceites esenciales, entre ellos el bisabolol y la apigenina, que contribuyen a sus efectos antiinflamatorios, antiespasmódicos y calmantes. Estas propiedades hacen que sea una opción ideal para:
1. Reducir la inflamación gástrica: Su capacidad antiinflamatoria ayuda a calmar el revestimiento del estómago en casos de gastritis o irritación.
2. Aliviar los espasmos intestinales: Estudios han demostrado que la manzanilla relaja los músculos del tracto digestivo, aliviando cólicos y calambres abdominales.
3. Mejorar la digestión: Consumir té de manzanilla después de las comidas puede estimular la secreción de jugos gástricos y facilitar la digestión, evitando la pesadez.
4. Calmar náuseas: Gracias a su acción sedante, también es útil para controlar episodios de náuseas y vómitos.
Evidencia científica
Diversas investigaciones respaldan los beneficios de la manzanilla para el sistema digestivo. Un estudio publicado en la revista *Molecular Medicine Reports* destaca que el bisabolol tiene efectos protectores contra úlceras gástricas y mejora la salud del revestimiento intestinal. Por su parte, la *National Center for Complementary and Integrative Health* (NCCIH) reconoce que la manzanilla puede ayudar con trastornos digestivos leves y recomienda su uso como parte de la medicina herbal.
Cómo consumirla
La forma más común de aprovechar los beneficios de la manzanilla es mediante infusiones. Para prepararla:
1. Hierve una taza de agua y añade una cucharada de flores secas de manzanilla.
2. Deja reposar durante 5-10 minutos.
3. Cuela y consume tibia, preferiblemente después de las comidas.
También existen extractos líquidos, cápsulas y aceites esenciales disponibles en farmacias y tiendas naturistas.
Precauciones
Aunque la manzanilla es segura para la mayoría de las personas, puede causar reacciones alérgicas en individuos sensibles a plantas de la familia Asterácea, como margaritas o ambrosías. Además, debe evitarse en mujeres embarazadas sin supervisión médica, ya que podría inducir contracciones uterinas.
Conclusión
La manzanilla es un aliado natural eficaz para mantener la salud del estómago y aliviar molestias digestivas. Su popularidad no solo se basa en la tradición, sino también en estudios científicos que confirman su efectividad. Sin embargo, como con cualquier remedio, es importante consumirla con precaución y consultar a un médico en caso de condiciones graves o tratamientos prolongados.
Con su versatilidad y beneficios comprobados, este sencillo remedio herbal sigue siendo una opción confiable y económica para cuidar el sistema digestivo.