Santo Domingo, República Dominicana. La madrugada de este martes, la emblemática discoteca Jet Set se convirtió en el escenario de una tragedia que ha conmocionado al país y al mundo artístico. El colapso del techo durante un concierto multitudinario ha dejado un saldo de al menos 66 fallecidos y más de 160 heridos. Entre las víctimas se encuentra el legendario cantante de merengue Rubby Pérez, cuyo cuerpo fue recuperado de entre los escombros alrededor de las cinco de la tarde.
El colapso y las labores de rescate
El incidente ocurrió cerca de la 1:00 a.m., mientras Rubby Pérez ofrecía una presentación en vivo ante una audiencia de cientos de personas. Según testigos, el techo comenzó a ceder repentinamente, causando pánico y caos entre los asistentes. Equipos de rescate trabajan incansablemente durante horas para localizar y salvar a las víctimas atrapadas bajo los escombros.
Declaraciones del director del COE
El exgeneral Juan Manuel Méndez, director del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), expresó su consternación por la magnitud de la tragedia. "Estamos enfrentando una situación sin precedentes. "Las labores de rescate han sido arduas, pero seguimos comprometidos en brindar apoyo a las familias afectadas y en esclarecer las causas de este lamentable incidente", afirmó Méndez. También destacó la importancia de reforzar las medidas de seguridad en los espacios públicos para evitar tragedias similares en el futuro.
Confusión inicial sobre el estado de Rubby Pérez.
En las primeras horas tras el colapso, se reportó que Rubby Pérez había sido rescatado con vida y estaba recibiendo atención médica. Sin embargo, estas afirmaciones fueron desmentidas más tarde por familiares del artista, quienes confirmaron que su cuerpo seguía desaparecido. Finalmente, su fallecimiento fue confirmado tras ser recuperado por los equipos de rescate.
Impacto en el mundo artístico
La muerte de Rubby Pérez ha dejado un vacío profundo en la música dominicana y en el género del merengue. Reconocido como "La voz más alta del merengue," Pérez fue una figura icónica que marcó generaciones con su talento y carisma. Artistas y seguidores de todo el mundo han expresado su dolor y rendido homenaje a su legado.
Investigación en curso
Las autoridades han iniciado una investigación exhaustiva para determinar las causas del colapso. Se sospecha que fallos estructurales y problemas de mantenimiento podrían haber contribuido al desastre. En 2023, la discoteca Jet Set ya había enfrentado un incendio provocado por un rayo, lo que plantea interrogantes sobre la seguridad del lugar.
Reacciones oficiales**
El presidente Luis Abinader visitó el lugar de la tragedia y expresó sus condolencias a las familias de las víctimas. Además, declaró tres días de duelo nacional en honor a los fallecidos. "Es un día oscuro para nuestra nación y para la música dominicana," afirmó el mandatario.
Un legado que trasciende
Rubby Pérez no solo fue un cantante excepcional, sino también un símbolo de resiliencia y pasión por la música. Su partida deja un vacío irreparable, pero su legado seguirá vivo en las canciones que marcaron la historia del merengue.
Biografía de Rubby Pérez
Roberto Antonio Pérez Herrera, conocido artísticamente como Rubby Pérez, nació el 8 de marzo de 1956 en Haina, República Dominicana. En su juventud, soñaba con ser beisbolista profesional, pero un accidente automovilístico truncó sus aspiraciones y lo llevó a dedicarse a la música. Estudió en el Conservatorio Nacional de Santo Domingo y comenzó su carrera en agrupaciones juveniles antes de unirse a la orquesta de Wilfrido Vargas en los años 80.
En 1987, Pérez inició su carrera como solista, lanzando éxitos como "Buscando tus Besos," "Dame Veneno" y "Enamorado de Ella". Su talento lo llevó a recibir múltiples premios, incluyendo discos de oro y platino en Venezuela y varios Premios Casandra en República Dominicana. Su música trascendió fronteras, consolidándolo como una figura clave en la historia del merengue.
Hoy, la República Dominicana y el mundo lloran la pérdida de un ícono cuya música seguirá resonando en los corazones de quienes celebran la vida con ritmo y alegría.